Choose a language:

lunes, 31 de diciembre de 2012

Vobis magnas gratias!

 
Ayer publicaria algo sobre la Sagrada Familia pero como no me sentía bien emocionalmente, no sentía deseos de escribir... pero escribiré la última entrada de este año.
Debo decir que ha sido un año dificil, un año en que muchas cosas que ocurrieron no quería que sucedieran, no quería "perder el control de la situación" pero a pesar de mi presunción y de mi actitud soberbia frente a la vida, aprendí que debo abandonarme a los proyectos de Dios en mi vida, me gusten o no. Con esta lección, he ahondado en la importancia de la humildad en los escritos y persona de Juan Pablo I (Albino Luciani).
A pesar de todos, he afianzado más los lazos de cariño y amistad con personas que no había tenido oportunidad de conocerlas a fondo en el verano de este año que acaba, de modo que terminé encariñándome bastante, hasta esperar interminablemente los momentos de ágape y abrazos interminables de afecto (las amistades que lean estas líneas sabrán de quienes hablo). Un anillo en mi dedo corazón da cuenta de ello y aunque no tenga un precio monetario altísimo, lo tengo celosamente conmigo como el tesoro más valioso que tengo (la amistad, que precisamente está en mi corazón).
Lo mejor ha sido el viaje a la 4ta Región, la Fiesta de la Candelaria de este año, el Gangnam Style, el retiro espiritual, el Encuentro de Zona Norte con motivo de la Misión Joven, ver a Coco Legrand en "Terrícolas: corruptos pero organizados", las guerras de agua, ver "Sherlock Holmes 2" en el cine, el IX encuentro juvenil con motivo de la Pascua de Mons. Fernando Ariztía, la creación de este blog, etc.
He sido testigo cercano de las batallas que ha librado alguien a quien quiero bastante, y que finalmente ganó esta guerra y busca enfrentar otra, pero espero que el próximo esté más presente. Por la falta de tiempo y de money en el celular como que he estado algo "dejado", pero esta amistad consolidada no se ha perdido... y espero no se pierda (como cierta pesadilla que tuve ayer).
Aún así, con mis virtudes y defectos, mi sensibilidad no me ha detenido en plasmar mis sentimientos cuando no soy capaz de expresar en palabras lo que quiero decir, escribiendo un texto o dedicando una canción. Me han faltado horas para seguir disfrutando de la música, tiempo para leer libros y tiempo para mí y la familia. Este año universitario ha estado tan acelerado, que tuve un traumático episodio de estrés casi a finales del primer semestre. No he juzgado ni condenado las faltas de otros por mucho que otros lo hicieran, solo he corregido fraternalmente sin tratar de aparecer como "el que tiene las respuestas a todo".
A pesar de mi timidez, la he enfrentado con los bolsillos llenos de caramelos como gesto de cariño y cercanía. Algunos compañeros de curso se han retirado de a poco, cosa que lamento, pero al compartir un ramo con otro curso (solamente mujeres) me han sacado abundantes sonrisas y carcajadas con sus bromas (algunas me han sonrojado mucho) a pesar del "cyclus apocalypticus" de la universidad. Y extrañamente, me he sentido tranquilo (ni siquiera sé porque) ni he entrado en situación de "presionar botón de pánico en caso de emergencia" y gritar histéricamente.
Me he reído de las leseras del fin del mundo (cosa que no ocurrió" y de los supuestos megaterremotos. Levanté los techos del cine y del teatro con mis risotadas (espero hacerlo en el Aula Pablo VI, o al menos, en el Estadio Techado). Mi paciencia ha sido puesta a prueba con algunas personas que no sabían ser personas, con quienes no eran capaces de ser comprensivos, con quienes no se daban el tiempo de entender mis discrepancias en ciertas materias (como la fe, visión de vida, etc.), a los que tenían vocación para fastidiar al prójimo, a las situaciones dolorosas que como Iglesia he tenido que vivir y padecer juntos, etc. He consolado y secado lágrimas del rostro cuando en mi interior sentía deseos de explotar en lágrimas. He meditado las situaciones en las que precisamente no sucedían como yo deseaba. He disfrutado con momentos entre amigos, las bromas que me han sonrojado, el Gangnam Style, las guerras de bombas de agua (que espero se repita pronto), las fotografías que registran momentos a modo de "chascarrillos", etc. He hecho rabiar a medio mundo con mis imitaciones de Guru-Guru, con mis ficticios "proyectos futuros" (ser un obispo capa negra con guantes negros de cuero y encima de los guantes el anillo y cosas así XD), pellizcando mejillas, hacer el "pollito", ponerme el pie dtrás de la nuca, etc. No sé bailar pero he hecho intentos de bailar el Gangnam Style (gracias Psy por esta canción que me ha alegrado y sacado risas cuando lo necesitaba).
Perdón si alguna vez he dicho o he hecho algo que pudiera molestar a alguien, pero les aseguro que no lo he hecho con mala intención, no me gusta dañar a las personas. Espero comprendan lo imperfecto que soy, como cualquier ser humano.
Espero que este año que se viene no sea tan acelerado y catastrófico como el año que dejaremos. Ojala que con mi colega reclutemos nuevos acólitos, porque solamente somos nosotros dos (además de ser mayores de edad) porque sabemos que no estaremos para siempre en este servicio y por mi parte, ya sé que me encuentro en mis últimos años como acólito (pronto cumpliré 10 años sirviendo a Dios en este pequeñito y silencioso ministerio).
Para este mundo que no para de dar vueltas sin control, espero que esta locura acelerada "baje sus revoluciones", se produzcan los cambios de corazones, volver la mirada a Él, nunca es tarde el arrepentimiento. Como quisiera que terminaran los conflictos del Medio Oriente, la tensión entre China y Japón, el posible estallido de un inminente conflicto nuclear entre Corea del Norte y Corea del Sur con los malditos misiles norcoreanos, la situación económica mundial, las explosiones de anarquía en el mundo, etc. De todos modos, mi deseo para todos es que vean al futuro con una sonrisa, venga lo que venga.
Agradezco a Dios, a mi familia, a los amigos sacerdotes, a las amistades de facebook, a mis compañeros (Marce, Julita, Diego, etc), a mis amistades "extraparroquiales" (Jocelyn, "Cachupina" y Walter) y a todos los que me han acompañado durante este año. No olvidaré estas duras lecciones de vida pero que sin duda han cambiado mi alma.
También agradezco a quienes se dan el tiempo de seguir este humilde blog cuando puedan, porque sé que todos tienen su propio ritmo de vida. Espero que les haya dejado algo. No olviden que escribo sin destinatario fijo (es para todos y sin hacer alguna clase de distinción o exclusión).
Un abrazo a todos ustedes.
Con cariño.
 
Pablo.
 
 
Postdata: Aprovechando que muchos alzarán en alto sus copas, compartiré unas líneas de la obra Carmina Burana que me hacen mucha gracia, pues precisamente hacen referencia al acto de beber: "Bibit hera, bibit herus bibit miles, bibit clerus, bibit ille, bibit illa, bibit servus, cum ancilla, bibit velox, bibit piger, bibit albus, bibit niger, bibit constants, bibit vagus, bibit rudis, bibit magus. Bibit pauper et egrotus, bibit exul et ignotus, bibit puer, bibit canus, bibit presul et decanus, bibit soror, bibit frater, bibit anus, bibit mater, bibit ista, bibit ille, bibunt centum, bibunt mille" ("La señora bebe, el señor bebe, el soldado bebe, el sacerdote bebe, el hombre bebe, la mujer bebe, el esclavo bebe, la esclava bebe, el hombre activo bebe, el indolente bebe, el hombre blanco bebe, el negro bebe, el perseverante bebe, el vago bebe, el ignorante bebe, el sabio bebe. El hombre pobre bebe y el invalido bebe, el desterrado bebe, el desconocido bebe, el muchacho bebe, el anciano bebe, el presidente bebe, el decano bebe, la hermana bebe, el hermano bebe, el viejo bebe, la madre bebe, esta bebe, aquel bebe, centenares beben, miles beben").

No hay comentarios:

Publicar un comentario